Somos lugares, recuerdos, fotogramas en movimiento, bandas sonoras, tiempo, olores y piel, somos muertes y nacimientos, todos morimos y nacemos más de una vez, lo que sucede entre medias somos solamente nosotros.
No hablo de reencarnaciones, hablo de quien sin quitarte la vida tienen
el poder de matarte y quien sin dártela te hace sentir que has vuelto a
nacer con una simple palabra, gesto, mirada o caricia.
Sobrevivimos hasta nuestra próxima última exhalación sin sospechar siquiera que para nosotros, tal y como nos conocemos en ese mismo instante, no habrá más.
Ignoramos nuestros propios límites y sin saber de mano de quién, nos sorprende un nuevo azote que nos despierta el llanto y nos ayuda a hinchar nuestros pulmones con aire tan nuevo como nuestro.
Somos lo que queramos ser, somos infinitos, la máquina perfecta con un tiempo limitado, somos vida y por ello disfrutamos de la grandeza de sentir.
No dejo de oír que aprendemos tarde pero tarde ¿para quién?
Hagámonos renacer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario