Rompen mi cabeza palabras cuidadosamente apiladas
en frases estratégicamente viscerales,
Nunca he llegado a entender del todo,
amor/odio,
rencor,
algo más,
ni siquiera eso...
Busco lo que no necesito,
engaño a mis dedos para que no me hablen de ti,
pero no maldigo, asimilo que para mi la verdad no se desgasta.
Aprendí pronto que la mejor manera de mirarte era a través de un espejo. Los espejos te convierten en quizás.
nos conocemos?
ResponderEliminar