Qué no daríamos por una hora más con quien ya no está, qué no daríamos por no sentirnos ni ser los culpables de su ausencia.

Laura

  No recuerdo el día exacto que fue, ni si fue lunes o martes, no sé donde estaba en aquel momento pero si que desde el primer instante que te oí supe que eras Tú, básicamente por dos motivos, primero tiraste por tierra la frase que tantas veces dicen las madres sobre no hablar con desconocidos, la segunda es que has sido la única persona que ha entrado en mi vida entre susurros y sonrisas.

 Días antes me habían hablado de lo buena chica que eras pero cuando tú vergüenza se hizo hueco al otro lado del teléfono entendí que por muchas cosas que me dijesen nunca conseguirían acercarse.
 Fue rápido, tanto que ni siquiera fui consciente de cómo, empecé a quererte sin poder evitarlo y a día de hoy, transcurrido el tiempo, no perdería un sólo segundo en intentar lograrlo.

  Cinco años, cuatrocientos kilómetros, horas de conversaciones, secretos, ideas, sueños, miedos... la distancia es dura, nadie lo discute, alguna vez me han preguntado si compensa aguantar teniendo en cuenta la cantidad de gente que nos rodea, te miro y sé que lo preguntan porque no te conocen, desde mi experiencia contigo elijo esperar, tanto como sea necesario, de sobra sabes que no tengo buena memoria pero aunque no guarde cada fecha y lugar sé que mis recuerdos quiero construirlos contigo.

Gracias por nuestra primera conversación en 2006, aquella tarde de Septiembre, gracias por todo lo que hemos vivido tras ella y lo que queda por venir.

1 comentario:

  1. Cuando sonríes, cuando lloras, cuando tiemblas, cuando tienes calor, cuando haces una broma, cuando te ríes a carcajada limpia, cuando respiras, cuando me miras, cuando bostezas, cuando duermes, cuando sueñas, cuando trabajas, cuando estas distraída, cuando me ignoras, cuando tienes los pies fríos, cuando no puedes dormir, cuando te despiertas a mitad de la noche, cuando me besas, cuando somos una, cuando me abrazas, cuando me respiras, cuando sientes, cuando tienes miedo, cuando estas contenta, cuando me echas de menos, cuando te enfadas, cuando estas ilusionada, cuando vives…cuando eres TÚ
    Porque en todos y cada uno de esos momentos no dejas de enamorarme.
    No imagino una vida mejor, que vivirla a tu lado.
    Te quiero, mucho, incluso con rabia…

    No tengo la menor duda; eres la mejor.

    PP&PS

    ResponderEliminar